Un millón de niños, sin distinción de raza ni religión, se unieron este sábado en oración a pedir por la unión y la Paz de las familias en el país y en el mundo entero. Los infantes católicos rezaron el Rosario, la oración predilecta de la Santísima Virgen María, recuerdan desde la organización. Oración en la que a través de la meditación de los misterios, la Madre de Dios enseña a contemplar la belleza del rostro de Cristo y a experimentar la profundidad de su amor. Los niños de otras religiones también fueron invitados a participar por este objetivo a través de sus propias oraciones. Esta iniciativa es impulsada desde 2005 por el Consejo de Laicos de Venezuela y replicada en otros países por iniciativa de la Fundación Iglesia Necesitada. Grace Alais de García Baldizzone, responsable en la Argentina de la propuesta, agradeció el apoyo de la hermana Kornelia Fischer, y la autorización para difundir la campaña de monseñor Eduardo Horacio García, provicario general y vicario de Pastoral de la arquidiócesis de Buenos Aires.
